San Lorenzo y Defensa y Justicia igualaron 0-0 en el Tito Tomaghello. El Ciclón falló en la definición y se terminó volviendo para Boedo con un solo punto.
La semana empezó complicada. Parecía que el partido se iba a posponer, después a retrasar y todo por los problemas con las camisetas, por suerte fue resuelto a tiempo y el partido comenzó en horario. A pesar de la ilusión de ver un buen fútbol el lunes por la tarde/noche, el primer partido en Varela pareció entre pichones y no entre Halcones y Cuervos. Ningún equipo propuso ni se mentalizó ir por el arco rival. Sí, muchos hablarán de que el Ciclón tuvo remates al arco de los locales, y es cierto. Sin embargo, no hubo peligro bajo los tres palos del Halcón. Algo que llama mucho la atención, teniendo en cuenta que le pateamos a Unsain en siete oportunidades. Por otro lado, para mi sorpresa, Braida pudo controlar su espacio, a pesar del poco trabajo que tuvo. A su vez, Giay pudo desplegar su juego habitual y en reiteradas ocasiones fue ayudado por Cerutti. Evidentemente, fue un primer tiempo que el CASLA nos tiene acostumbrados: malo, pero seguro y sin ser lastimado.
En la segunda mitad, ingresó Vombergar por el Perrito Barrios. Si bien tuvimos mayor influencia en el terreno de Defensa y Justicia, perdimos velocidad y creatividad en la mitad de la cancha. San Lorenzo pasó a ser un equipo más punzante y vertical. A pesar de eso, no tuvo jugadas claras para poder romper el empate. En contraparte, Batalla tuvo que salvar el arco cuando en un centro cruzado, Alanís tuvo la posibilidad de abrir el marcador. Sin conformidad por parte del Gallego Insúa, entró Leguizamón. Como es habitual, el pibe entró bien y rápidamente metió dos buenos amagues y un tiro al arco. Justamente lo que necesitaban los de Boedo, buscar el arco rival. Pero la (dura) realidad, es que no podemos depender de los pibes. Los Cuervos necesitamos sumar de a tres y dejar de empatar. Insúa no tiene el peor equipo del torneo (tampoco el mejor), pero la realidad es que hay muchos partidos en los que pudo ganar y no lo hizo, justamente por la falta de precisión y malas decisiones en el medio campo.
El próximo sábado vamos a recibir a Atlético Tucumán y será un partido difícil. Aunque, por otro lado, el juego de los tucumanos podría servirle al Ciclón, porque ellos van a buscar el arco rival y a nosotros nos serviría. Eso sí, deberíamos aprovechar los espacios y afinar la puntería.