Cuando se deja todo dentro de la cancha, no hay reproches. Cuando se deja todo para defender los colores de San Lorenzo, no hay palabras para decirles a los protagonistas. Hoy, el Ciclón se despide de la Copa Sudamericana en octavos de final contra San Pablo, uno de los candidatos al título.
Lo tuvo en el primer tiempo, con el travesaño de Nahuel Barrios, pero no se dio. Los goles de Calleri y Luciano quitaron la ilusión de un equipo que dejó todo en la cancha. “Dejamos todo, no nos guardamos nada. El resultado no es justo. No nos recriminamos nada, nos vamos con la cabeza en alto”, dijo el sub capitán Jalil Elías.
La cabeza en alto es importante para un equipo que peleó en lo que va del año en los tres frentes. Rafael Pérez dijo: “La verdad que veníamos con la ilusión y hoy se acaba este sueño pero tenemos que tener la frente en alto porque este equipo siempre se entregó, siempre luchó hasta el final. Con la desilusión y todo lo que cuesta una descalificación tenemos que irnos con la frente en alto”. También habló el goleador de la ida, Adam Bareiro y mencionó: “Esto es así, lastimosamente nos toca despedirnos de una competición donde hicimos todo para ganar. Tenemos que seguir trabajando y esforzándonos. Este grupo de jóvenes va a seguir creciendo”
Con un plantel plagado de juveniles, San Lorenzo terminó tercero en el campeonato local, avanzó hasta los octavos de una competencia internacional y pasó los dieciséis de final de la Copa Argentina. Hay que seguir creciendo, se viene la Copa de la Liga y los octavos de final de la Copa Argentina. Se corta la ilusión de un equipo que no puede aceptar ningún tipo de reproches.