San Lorenzo eliminado de la Libertadores, ya se tiene que poner en mente su futuro inmediato en la Copa de la Liga y la Sudamericana. El sábado enfrenta a Argentinos Juniors y el miércoles a Huachipato.
Ya no hay tiempo de lamentos, ya no hay más. De lo que pudo haber pasado o si antes jugada este u otro. San Lorenzo debe encaminarse a proyectar lo que viene, pensando en las chances que tiene de clasificar en el certamen local y en su debut copero en el Gasómetro. El empate en Brasil ha dejado la moral del equipo en alza, sabiendo que la figura del rival fue su arquero y eso es meritorio, como también lo fue reivindicarse en inferioridad numérica .
En este contexto el empate y el sacrificio tiene otro valor. Lo que viene es necesario para recobrar el lugar al que pertenece San Lorenzo, el de la pelea, el de las noches de Copa. Por supuesto que nos hubiera encantado especular con la cita semanal y soñar con tener nuevamente a la más linda, pero nos toca estar con la prima, que tiene su encanto, que la conocemos y fuimos los primeros en besar. La Copa Sudamericana está a la vuelta de la esquina, esperando por volver a CASLA . En medio algunos obstáculos, una zona cargada de viajes: Rosario, Chile y Paraguay.
En el ámbito casero, el equipo de Dabove sigue dependiendo de sí mismo para lograr el objetivo de clasificar a la siguiente fase de La Liga. A tan sólo un punto del último equipo clasificado, todavía resta jugar contra River en el Monumental y con Racing en el Cilindro. Paradas difíciles, pero ¿Cuándo San Lorenzo tuvo algo fácil? Recuperando algunos soldados, ajustando detalles San Lorenzo está capacitado para dar pelea en ambos frentes y hacer borrón y copa nueva,