«Estamos en negociaciones constantes con Torrico, pero hay una distancia muy grande entre lo que ofrecimos y lo que él pretende», dijo Horacio Arreceygor, presidente de San Lorenzo y sembró una polémica innecesaria entre tanto desajuste dirigencial. No hace falta mencionar la infinidad de veces que Torrico salvó a San Lorenzo pero quizás si habría que ayudar a recordar que el arquero viene de tener un contrato por productividad, dado que no venia siendo titular. Es decir que, siendo la figura del plantel y capitán del equipo, el presidente duda en firmar su renovación.
A su vez, es lógico que y entendible que en CASLA quieran bajar el presupuesto, pero justamente Sebastián Torrico no es el lugar donde amedrentar y mucho menos exponer ante los medios ( El Plateista), mencionando que el mendocino quiere más dinero. Insistimos, el jugador tiene(hasta el 30 de junio) contrato por producción. Dentro del plantel existen otros sectores donde escarbar y llevar a cabo una baja de salario. Tampoco hay que olvidar que fue esta misma dirigencia la que compró el pase de Diego Rodríguez, la que hizo el contrato de Cerutti y de Monetti ( sin temor a exagerar, el arquero suplente mejor pago del fútbol argentino) y ahora se apura para bajar los costos .
Tampoco debemos dejar de lado, que fue el propio Marcelo Tinelli quien publicó en sus redes sociales que la renovación del Cóndor estaba arreglada de palabra, pero como ya nos demostraron, las palabras se las lleva el viento. Se olvidan en el éter cibernético o en alguna licencia.
No es novedad que San Lorenzo destrate a los ídolos. Había pasado con Ortigoza y el tire y afloje entre el tiempo de contrato. El hincha se puso contento al enterarse de la vuelta de Néstor, pero ayer volvió a expresarse en contra de las declaraciones del hoy presidente azulgrana y por supuesto, el pueblo no olvida quien lo hizo feliz. Finalmente Torrico parece que vuelve a pagar los platos rotos ajenos, o mejor dicho, pagar los contratos ajenos, en cancha y entrenando doble turno.