¿TOCÓ FONDO?: SAN LORENZO CAYÓ ANTE DEFENSA Y JUSTICIA.

Otra actuación decepcionante y van.

San Lorenzo acumula cinco derrotas en los últimos seis encuentros (Colón de Santa Fe, Boca Juniors, Central Córdoba de Santiago del Estero, Huracán y Defensa y Justicia), y la situación comienza a ser desesperante, puesto que quedó a ocho puntos del líder Agentinos Juniors, y comienza a preocupar el promedio de la próxima temporada.

En consecuencia, ésta tarde el público azulgrana se hizo escuchar en el Pedro Bidegain con el famoso cantito «qué se vayan todos, que no quede ni uno solo», también hubo silbidos para Nicolás Navarro (se pidió por el regreso a la titularidad de Sebastián Torrico) y Fernando Belluschi, hasta cuando se retiró lesionado; y descontento con la dirigencia, principalmente con el Presidente.

Sin dudas, las responsabilidades de ésta pésima actualidad futbolística son compartidas. En principio, los dirigentes que se equivocaron en los últimos mercados de pases (sobretodo en el ciclo de Jorge Almirón) y, en el caso específico de Lammens, se dedicó más a su candidatura política que al club; después Juan Antonio Pizzi, quien evidentemente no le encuentra la vuelta al equipo; y por último los jugadores que ni siquiera muestran rebeldía, actitud dentro del campo.

Respecto al partido, el «Ciclón» careció de marca en el mediocampo (no funciona el doble cinco conformado por Gerónimo Poblete y Lucas Menossi), sufrió serios sobresaltos en defensa (los laterales se proyectan con criterio pero tienen dificultades con el retroceso) y es previsible en ofensiva.

Vale destacar, el esfuerzo, la tarea del juvenil Alexander Díaz, que sólo se las ingenió para inquietar a la última línea de la visita.

En definitiva, afuera de la Copa Libertadores ante Cerro Porteño, lejos de la cima en la Superliga, ¿San Lorenzo tocó fondo. ¿Renunciará Juan Antonio Pizzi, tras el 1-3 ante Defensa y Justicia?. ¿Si continúa el técnico, hará una limpieza en el plantel?. Son algunos de los interrogantes que surgen tras observar otra caída en condición de local que profundiza aún más la crisis.