Al presidente Matías Lammens, todavía en funciones, se le suman los reclamos para que haga efectivo su pedido de licencia.
Núcleo duro, microclima, trascendidos, opiniones al aire y la dificultad de medir el daño que le genera al club, o qué efectos secundarios puede sentir San Lorenzo si el presidente sigue mostrándose como candidato a jefe de gobierno sin ordenar su situación administrativa.
Si cada partido en condición de local, por cuestiones horarias, de seguridad o vialidad ya es un trastorno con el gobierno de la ciudad, puede presumirse que enfrentarse a Rodríguez Larreta en cada aparición mediática difícilmente ayude a la cuestión.
Lo de la vuelta a Boedo es de más difícil pronóstico, pero rebota más aún en el hincha y entonces se agranda la preocupación.
Si ya es evidente que Marcelo Tinelli tomó las riendas de la actualidad… ¿No sería deseable que se reúna la comisión directiva y hagan oficial lo que ya se verifica en los hechos? El orden nunca hace daño y además sería cumplir con la palabra, dado que la idea era cerrar el tema escritura y cambiar su status. Pues bien, seguimos a la espera.